POR LA LACTANCIA, hoy y siempre..

Pues aunque una hora tarde no podía faltar una entrada de algo tan importante en mi vida. La lactancia.

He tenido mucha suerte porqué los pediatras siempre me han dicho que yo en vez de leche tenía leche condensada, jejeje, es decir, he tenido mucha leche y muy muy buena.

En casa no nos lo podíamos creer, porque aunque mi familia son de buena pechera a la hora de mamar no han tenido mucha leche. Mi madre siempre me dice que ella me daba de mamar pero que yo solo lloraba y lloraba todo el día y toda la noche, lo pasó muy mal y me llevaba al pediatra y el pediatra le decía que ¨serían gases¨, hasta que llegaron los 3 meses y yo pesaba menos que cuando nací.
Así que, un día, mientras me cuidaba mi abuela fue a la farmacia y me compró un biberón y leche, dice que no paré de beber con ansia porqué mis lloros eran que estaba muerta de hambre.
Cuando llegó mi madre alucinó, la pobre, y por supuesto, cambiamos de pediatra.

Pues bien, como yo tampoco tengo la pechonalidad de las mujeres de mi familia ( uso la normalita  talla 90), no podía creerme que pudiese ser tan buena fábrica de leche.

Mi experiencia ha sido maravillosa. Ver a tu hijo que depende de ti, de tu cuerpo, es increíble. Yo siempre los miraba y pensaba ¨hace unos meses estabas dentro de mi barriga y aunque estábamos unidos no podía verte pero te sentía, y ahora seguimos unidos por este acto tan natural.
 Amamantar, darte de mi todo lo mejor de mi cuerpo. Verte crecer gracias a mi, a mis vitaminas a mis proteínas. Seguir siendo uno.
Sin que exista el tiempo, ni el lugar, cuando tu lo necesitas mamá aquí está para dártelo.

Un vínculo tan especial que querríamos que no se terminase nunca.

He amamantado a mis 2 hijos 1 año y 1 mes, sin hacerlo a propósito ha sido el mismo tiempo para los dos.
Por desgracia me puse malita en los 2 casos.

Con mi Sol, me picó una araña de esas venenosas, empezó con una ampolla que llegó a ser del tamaño de un puño y me salieron ronchas por todo el cuerpo, así que el dermatólogo me mandó una medicación muy fuerte porqué tenía el veneno en la sangre por lo que se me iba pasando de un lado a otro, y había que cortarlo de golpe. Así que ya os imaginaréis que tipo de medicación era.

Con mi Lunita, se me infectaron las anginas,entre otras cosas, durante un tiempo me ponía mucho enferma eso conlleva desmayos.. porque me estaban bajando las defensas en picado, por lo que no podía seguir amamantando porque físicamente mi cuerpo no lo podía soportar. 

Recuerdo tanto esos momentos tristes.
Yo no me he medicado en todo el embarazo ni en toda la lactancia, pero nada de nada. Y mira que padezco migrañas, pero por tal de que no les pudiese perjudicar no he entrado ni en bares!
Por eso ese momento, cuando el médico me dijo que no podía seguir, me sentí fatal. Empecé a llorar y me dijeron ¨tu hijo necesita a su mamá sana, así que para que ellos estén bien tu has de estar bien¨

Y la verdad es que fue una frase que me calmó mucho la conciencia. Aun así al llegar a casa antes de tomarme nada quise hacer una ¨última vez¨, sintiendo, tocando, amando... tanto tanto, que no pude para de llorar de la primera hasta la última gota.
Para mi era un cambio enorme, la personita que solo dependía de mí, que solo se conformaba y me buscaba a mí para comer se iba a hacer autosuficiente.
Como yo le decía a mi marido entre lágrimas, ya no le soy imprescindible.
Así que lo dejé dormidito en su cuna, tranquilito llevándome ese último recuerdo de nosotros dos piel con piel. 

Me costó varios meses el calmar mis emociones a las horas que antes tocaba el pecho... Y la verdad creí que a ellos les costaría más, pero me ayudó el hecho que no fuera así.

Con mi niña fue lo mismo, mi última vez la recordaré siempre, pero al igual que su hermano llevó bastante bien el día que se nos acabó todo.

A día de hoy aun recuerdo sus posturas, sus caritas, sus manos cogiéndome el pecho. Lo recuerdo con mucha ternura,con mucho amor, con mucho sentimiento.

y ¿ sabéis que ?
que cada noche mientras me cambio de ropa mis dos niños entran a la habitación y cuando me ven con el torso desnudo me abrazan y les dan un besito, porqué aunque nosotras lo creamos ese vínculo no se perderá nunca!!



PD: Ojala hubiese conocido la relactancia, como he leído en el precioso post de ¨mi cucolinet¨, pero lamentablemente no tenía ni idea que fuese posible. Que lástima, que poca información nos dan en los hospitales, parece que ya no hay respeto por los valores mas primitivos.

2 comentarios:

  1. He llegado aqui desde mi cucolinet para comentarte una cosa y aqui.estoy llorando al leerte. Que bonita y triste a la vez tu experiencia. por mail un dia si quieres te cuento mi experiencia de relactacion porque en elblog aunque esta, a saber donde. tengo que ordenarlo un poco.
    era sobre lo de seguir los blogs. el que no te salga esa opcion depende de que rellos tengan o no instalado el gadget. he visto que el tuyo es de bloger entonces basta que copies la direcvion del que quieras seguir y cuando estas en tu pantalla del perfil. con tus entradas y eso, le des donde tienes la lista de los blogs que sigues. alli te sale añadir. pegas el enlace y punto. Algunos que no son de blogger dan problemas y no se quedan grabados o no te salen las actualizaciones. creo que inma de cucolinet sabe de una pagina planetaky. creo para poner esos.
    Te he metudo un rollo gordo. perdona si esto ya lo sabias y no te ha servido de nada. un beso

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